miércoles, 2 de septiembre de 2009

Ríos de tinta (edición revisada)

Por Ya’akov Ben Tzion

A guisa de Prólogo

"Ríos de tinta", es una expresión que francamente no tengo idea quién la haya acuñado y por qué. Pero encaja como una concisa y contundente síntesis de lo que ha sucedido en la Historia de la fe. Por lo cual me parece que yo haría muy poco favor a quien lee esto, haciendo una exposición vanamente recargada en palabras y retórica barroca, excedida de forma tal que le lleva mucho tiempo al observador apreciar detalles, y que a la vez empalaga la vista si se trata de apreciar de lejos el conjunto.

Por otra parte, en estos tiempos en los cuales es tan vasta, diversa y abundante la información en todos los rubros del conocimiento, no vale la pena demorar la investigación de quien está interesado en esclarecer sus conceptos, y sus conocimientos, referentes a la fe, empantanándolo con vana palabrería. Digo esto en una estricta autocrítica. Quiero reiterar lo que he venido argumentando en varias entradas de este blog: Toda religión es un camino torcido, incitado por Satanás, y maquinado por las mentes perversas de los hombres, y fútil para llegar a DIOS. Por lo cual en esta disertación, no exalto, ni predico, ni promuevo, ni fundamento, ni provoco, ni quiero hacerlo: una teología, o filosofía, o dogma, o religión, o secta alguna. Tan solo me preocupa que DIOS nos lleve a toda verdad. Quiera ÉL tener misericordia de todos nosotros. Y a mí, me impida hablar mentiras, para así no llegar en culpa a enfrentar en el día del Juicio al DIOS VIVIENTE. Amén.

Breve reseña personal

Redirigir, corregir la dirección es dramáticamente imperativo. Brevemente explicaré esto: Hubo un tiempo cuando ingenuamente pensaba que en tratándose de DIOS; todo aquel que hablara en su Nombre, es decir, haciendo referencia a lo que a DIOS y su bendita Palabra concierne; debía ser un siervo sincero y sin doblez virtualmente y por añadidura, había temor de DIOS en su corazón. Decir: ingenuamente, no significa de mi parte que tal ingenuidad sea razón suficiente para disculpar, ni mi ignorancia, ni cualquier otro factor que pudiera haber incidido en el error o serie de errores que me llevaron a oír primero a los hombres "de Dios", antes que oír a DIOS.

Pese a leer con avidez La Biblia, y por gracia de DIOS la bendición de tener una aceptable comprensión de lo leído. La miopía espiritual que tuve por mucho tiempo, seguramente aunada a la inexperiencia propia de un niño espiritual que hacen del prosélito una veleta llevada de todo tipo de viento espiritual, o como bien dice la palabra "como esas mujercillas…" La fuerte necesidad personal tanto espiritual como material, y una torpe idea de lo que es: la sujeción a la "autoridad" o autoridades de la iglesia, facilita la sumisión a ultranza, lo mismo que cohibe y proscribe toda forma de rebeldía. Aun el sano análisis y discernimiento que no es murmuración es reprimido desde afuera y luego desde dentro del creyente cualquier intento de ejercer su derecho a un legítimo, y por demás indispensable tamiz espiritual: lo que se mira, lo que se oye, y lo que nos es enseñado.

Esa torpe manera de actuar de mi parte, es compartida por una multitud increíblemente grande de creyentes ineptos e inmaduros; conduce a que las mentiras doctrinales permanezcan ocultas y aun, más proliferen contaminando con su podredumbre a esas multitudes que marchan como ovejas estúpidas al matadero, guiadas por lobos rapaces. Conlleva al error de considerar como hermanos a toda la humanidad, y por extensión, a toda comunidad de creyentes; como si creer, y decir creer fueran una garantía de calidad y confianza en una auténtica y sincera comunión del presunto creyente con dios alguno, y aun más, con el Verdadero DIOS. Se asume por tanto, y haciendo alusión estrictamente al sentido espiritual: que todo sacrificio de alabanza, ofrenda voluntaria, y todo diezmo, es presentada en el altar correcto. Y se presume, que toda forma de adoración es agradable a DIOS, que toda forma de proselitismo y crecimiento congregacional es recto. Que toda doctrina es verdadera porque "habla de DIOS" o porque "alude a la Biblia" o porque se sella con "el nombre" (en minúsculas con deliberada intención).

Con argumentos espurios tales como "todos somos hijos de dios", "no existe la iglesia perfecta", "dios no hace acepción de personas" "el mundo para cristo" (minúsculas adrede). Quienes son, como quien ahora escribe este texto, nos asimilamos sin cautela ni reserva, a cualquier corriente de viento espiritual sin aplicar la más mínima gota de inteligencia y cuanto menos de discernimiento espiritual, confiados en que: Si se habla de Dios, y temor de Dios, con reverencia a DIOS, en consecuencia es de DIOS, y que toda la obra que se hace, se hace para DIOS. Confundiendo mansedumbre con estupidez, "buena fe" con gregarismo a ultranza; y confundiendo la buena voluntad de DIOS, con "hombres de buena voluntad". Las técnicas de crecimiento congregacional, se confunden con guía del Espíritu Santo. Se toma por sana doctrina las predicaciones cuajadas de bonitas palabras tomadas de la Biblia tomadas tendenciosamente, y entresacadas y descontextualizadas terminan por desvirtuar el sentido y la interpretación, transformando la motivación existencial a mensaje de vida o edificación escondiendo la verdad espiritual contenida. De parte del predicador en muchas veces por ignorancia, y las más por un espíritu nicolaíta y mercader. Y otras tantas confusiones que seguramente se me escapan, y que, quien lee puede aportar de acuerdo a su experiencia congregacional, y amplificar para enriquecer estos conceptos, es como la gran mayoría de los creyentes en "Dios" vamos pululando por la vida.

El no haber sido mal intencionados al cometer estos y seguramente otros muchos errores garrafales doctrinales, no exime a nadie, comenzando por el que escribe, de la responsabilidad de haber permanecido adormecidos y paralíticos, indemnes a esta realidad, a despecho de llevar el fuego de DIOS encendido en el corazón. Ni hace de nosotros seres diferentes a cualquier idólatra que es abominación a DIOS. Tómese lo que has leído hasta aquí como lo que es: una grave confesión de error, delante de ti, y principalmente delante de DIOS.

Exposición del tema principal

Entremos ahora a lo que debe ser trascendente de aquí en adelante, para nuestras vidas. De manera sucinta como prometí líneas arriba, hagamos las siguientes declaraciones, con las cuales puedes o no estar de acuerdo haciendo uso de al derecho que DIOS te otorgó, y el cual es inalienable por hombre alguno:

DIOS, es real y veraz. Es fiel, Es amor que abarca: Justo, Misericordioso, y Bueno. No cambia, Es Eterno, Es UNO. Que después de un análisis espiritual, (conste que no digo revelación divina), una revisión exhaustiva de diferentes fuentes y bibliografías me atrevo a concluir, afirmar y sugerir en forma escueta la siguiente argumentación.


Relativa la Persona de DIOS y la doctrina verdadera al respecto.

Por los objetivos particulares de este articulo no entraré sino en un escueto esbozo de las tres corrientes fundamentales de la teología judaico cristiana. Es a saber: la Unicidad, el Trinitarismo, y el Unitarismo, limitándome en su oportunidad a añadir la información acerca de las fuentes documentales a partir de las cuales se hacen las conclusiones y comentarios a continuación o estimulando a quien lea a buscar por su iniciativa mayor información.

Por cuanto se refiere al Mesías, no solamente en el cristianismo, también dentro del mesianismo israelita o judaico, hay corrientes divergentes en lo concerniente a la personalidad de Yeshúa HaMashiaj. Ni es privativo del cristianismo la tentación consumada de tergiversar la escritura con tal de consumar la sustentación del dogma. Nuestro Señor, su naturaleza divina y humana, su reconocimiento como El Mesías de Israel por parte de los judíos ortodoxos, su posición de autoridad con respecto a El Padre, y su preexistencia, son motivo de una amplia cristología a la cual hago referencia como Ríos de tinta, y de no pocas controversias. Finalmente la relación del Espíritu Santo, su relación con El Padre, y El Hijo, Su autoridad, y si es o no persona. Generan estas terribles controversias y posturas irreconciliables entre las tres corrientes teológicas.

La Unicidad de DIOS, es la forma más equilibrada y congruente de asimilar a DIOS de acuerdo a la capacidad humana de comprender y definir a DIOS, con apego de las Escrituras, y en apariencia, independiente a la tentación consumada o no, de añadir o quitar de las mismas, para lograr un sustento espiritual, ni "mayoría de votos" para legalizarla o autenticarla. En síntesis propone la indivisibilidad de DIOS, admitiendo que El Padre, El Hijo, y El (la en sentido estrictamente gramatical en el hebreo) Ruáj HaKodesh o sea Espíritu Santo, consisten en realidad: tres formas de manifestación de EL MISMO, ÚNICO e INVIDISIBLE DIOS. Creador, Eterno y en todo Divino. A este respecto, y con la finalidad de no sustentar por mi solo dicho estas afirmaciones, prefiero no abundar en esta corriente doctrinal, e invito a quien lee, revise la literatura relativa a la Unicidad, (si es que antes de hoy no lo ha revisado).

La Trinidad, siendo probadamente pagana. Ya en el contexto de la Iglesia Cristiana, procede y apela, a los argumentos propios de filosofías griegas neoplatónicas que nada tienen que ver con el pensamiento hebreo ni la revelación divina. Emparentada en la antigüedad con cosmogonías sumerias, babilónicas, asirias, e inclusive egipcias, paganas. La visión trinitaria, es inadmisible en el contexto de un DIOS Único e indivisible, tal y como está manifestado en Deuteronomio 6:4 (D'varim en el Tanaj), y a lo largo de toda la Escritura, tanto en el Tanaj como en el Brit HaDashá (conocidos por la iglesia por los nombres de Antiguo y Nuevo Testamento respectivamente). Por lo anterior, el dogma trinitario, documentalmente en base a la Escritura, se tuvo que valer de la manipulación y tergiversación de los textos disponibles a partir de los cuales se ajustaron y modificaron textos específicos como Mateo 28:19 entre otros. Esta manipulación, hace vulnerable a la fe, y al dogma, difícilmente compatible con el Monoteísmo, hebreo y apostólico. Por si no bastara con esto. Roma con su sincretismo añadió materia pagana en la figura del Cristo, que permiten y provocan una fatídica e inevitable comparación con Mitra, una deidad solar, comenzando por cambiar el día de reposo (Shabat)al día del sol (o sun-day: domingo)merced a una perversa manipulación y alteración del día de la inmolación de Yeshúa en el madero, para así poder alterar el día de la resurrección. Literalmente arrastrando con ello, no solamente a la Iglesia Católica Apostólica Romana, sino a la cristiandad posterior al siglo IV de la era actual. Agregando además, elementos litúrgicos de dicho culto a Mitra, y de los cultos a Dagón (entre otros el uso y forma de la mitra papal) en en la estructura y jerarquía sacerdotal, perfectamente documentada en diversas fuentes bibliográficas. Con toda intención escribí: inmolar, y madero; para deslindar a Yeshúa del arquetipo de la crucifixión y la cruz que lo asocian irremediablemente al elemento y forma de la cruz pagana, y que está bien documentado que tal y como se dibuja esta por parte de Roma, son una clara referencia a elementos cósmicos tales como la cruz de los cuadrantes zodiacales. (Ver los documentales de Ziegeist entre otros documentos relacionados). Nuestro ADÓN (Señor) Yeshúa HaMashiaj, hacíendose maldición por nuestra causa, colgó del madero: Escrito está: "maldito el que cuelga de un madero"... no atado a él, pues dice también: "fue traspasado..." y "a quien traspasaron".

El Unitarismo por su parte, incumple con la verdad, en su afán a ultranza, de negar la deidad del Mesías, conduciendo la escritura de modo tendencioso, a dos únicas alternativas posibles: La primera a considerar a Yeshúa como un Yahweh menor, y con esto, a la condición de un dios menor, creado y subordinado al Padre (donde toma fuerza el Arrianismo, y las cosmogonías de iglesias como los Testigos de Jehová, los Cristadelfinos entre otros), de donde resulta disminuida la deidad del Mesías. Y complicando el cuadro con la presentación y sustentación del "principio de agencia divina" en el cual "un ángel" no especificando si siempre el mismo o cambiante, es designado portador de El Nombre de Yahweh bajo la autorización y por voluntad Divina para actuar en Nombre de YAHWEH Elohim, a fin de intervenir en el devenir de la historia del hombre en aquellos hitos en que se manifestó el Poder de D' s, como la destrucción de Sodoma y Gomorra entre otros, lo que para empezar entra en conflicto con la Palabra en varias porciones principalmente del libro de Isaías "No ha sido formado D' s antes ni después de Mí".... La segunda, por otra parte, a excluir toda posibilidad de la naturaleza divina de El Hijo, abriendo la puerta a herejías y fantasías como toda la imaginaria narrativa de obras como "El Código da Vinci" por ejemplo. Aceptar que en su humanidad sin divinidad, fuera posible que el Mesías hubiera tenido esposa o aun concubinas (pues por más que se manipule el texto de las bodas de Canaa, no hay texto que apoye la idea de un Jesús casado y padre de familia), descalificándolo de ser el Perfecto Sacrificio. Sujetándole a la posibilidad de haber pecado al solo tener naturaleza humana. Afirmar que El Mesías no pecó, siendo solamente de naturaleza humana y no divina entraría en contradicción con la Palabra donde dice: "Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque". Eclesiastés 7:20; y solo para empezar. Consecuentemente, abre la puerta a concepciones gnósticas, y modernas corrientes como la New Age, la Cienciología y la Metafísica, que invitan a buscar en el Yo interior esa naturaleza divina que nos hace iguales a Jesús pues "todos somos hijos de Dios". Y por si fuera poco, dejándonos absolutamente indefensos ante la amenaza de la irremediable condenación eterna, o a la imperativa necesidad de hacer las obras para salvación, y no por obediencia y amor reverente a Yahweh, anulando la salvación que es por la fe y la gracia. El Unitarismo por último reduce al Espíritu Santo, al papel y concepto de una mera fuerza o potencia emanada de la deidad, pero jamás a ser inmanente a la deidad. En síntesis, siendo completamente irreconciliables entre sí como verdad, son excluyentes por consecuencia, y solo una de las tres es verdadera y las dos restantes son mentira.

Un corte de caja o conclusión anticipada hasta aquí.

Esta trágica incompatibilidad, irreconciliable y mutuamente excluyente entre estas tres corrientes conceptuales respecto a la Naturaleza, Integridad y correlación entre las manifestaciones de la Deidad a saber Padre, Hijo y Ruáj HaKodesh Espíritu Santo. De la mano con el derecho inalienable a la libertad de criterio, culto, decisión y elección de cada ser humano. Hacen improcedente e inviable toda asociación libre entre creyentes, a despecho y por encima del más noble y loable deseo; y de toda buena intención de llevar a toda la humanidad, y por consecuencia a toda la comunidad creyente, a una hermandad sincera, y sana convivencia humana, al amparo de una misma fe y un mismo Espíritu. Partiendo de la verdad contundente que con tan profundas diferencias doctrinales como base, no se estaría adorando al mismo Dios, por más que en un deseo de "buena intención" Ingénuamente persistamos en pensar que al referirnos genéricamente a DIOS por Dios, Cristo, Jehová o aun sin alterar o modificar fiestas,días de reposo postura ante la gracia y la Toráh. O al margen de la trascendencia de esta y otras divergencias se está adorando "al mismo Dios", ni sus divergencias doctrinales resultan intrascendentes. Ignorar este terrible verdad nos conducirá indefectiblemente primero por persuasión, y luego por arrastre, al temible Ecumenismo final, de los postreros días, a Misterio Babilonia: lagran ramera de Apocalipsis, quien lee entienda. DIOS nos ayude a saber decidir correctamente.

Pretender unirnos bajo una misma bandera espiritual no ecuménica, implica y requiere que todas las posturas doctrinales, aceptemos la necesidad de hacer una profunda revisión de nuestras doctrinas. Evitando caer en la tentación de ejercer la manipulación de las Escrituras a conveniencia de cada postura a fin de imponerse sobre las otras. No cediendo a la tentación de amoldar a DIOS a nuestra voluntad, sino por lo contrario: Ajustarnos nosotros al DIOS Manifestado en su Palabra inviolada.

La importancia de tomar una decisión y cómo tomarla

Conducta prudente. Término sustituto de los términos: piadoso, justo, cristiano, fiel, y otros sinónimos para hablar un idioma equilibrado, exento influencias de denominaciones, dogmas, eufemismos, o sutilmente impositivos.
No es suficiente con tener un corazón sincero, humilde y dispuesto para considerar que estamos dentro de la voluntad de DIOS, ni basta con "seguir" a Cristo. ¿Es necesario tomar decisiones libremente, informados, sin coacción ni acción coercitiva de institución humana, religiosa, por efecto de filosofía, teología, inducción dogmática ni doctrinal, sea cual esta sea? ¡Sí!, un rotundo, categórico, bendito, libre y bienaventurado ¡Sí!

Para llegar a saber en cuál DIOS hemos creído y ante cuál altar estamos presentando nuestra ofrenda, y para llegar a comprender qué tipo de ofrenda es la que a DIOS agrada. Para no ser engañados ni del diablo ni de los hombres (incluido este que escribe). Teniendo en cuenta que Satanás, siempre ha pretendido colocar su estrado al lado de DIOS. Y que a lo largo de los siglos ha contado con seguidores y sacerdotes que concientemente le rinden adoración y trabajan para sus obscuros propósitos Debemos ser cautos y entendidos para saber que estamos adorando al verdadero DIOS, y no al que nos han hecho creer que es Dios, o aun, a aquel que, bien por ignorancia, engaño, tradición, o por conveniencia, hemos venido proclamado Dios de nuestra vida. Debiendo mencionar aquí al dios del dinero. Mamón, promovido abundantemente a partir del "evangelio de la prosperidad". Y por otra parte para decidir qué conductas voluntarias asumir en obediencia y reverencia a DIOS, y por qué asumirlas o por qué no.

Relativa al Nombre o Nombres de DIOS.

YAHWEH es la transliteración más apegada a la verdad; y la pronunciación (iaue) la más cercana a la verdadera forma de pronunciar el Nombre de DIOS. Que Dios, no es un nombre sino un título, (además inadecuado) para nombrar al CREADOR. Razón por la cual a parir de este punto en aras de no hacer más complicado el tema, ni totalmente ser del todo irreverente al ETERNO, comienzo a utilizar esta forma: D' s, en forma convencional y sustituta con fines explicativos solamente.

Que D' s, tiene un nombre con el cual se dio a conocer a los hombres hasta los días de Malaquías profeta, YAHWEH Bendito Sea. Y que estando entre nosotros en su primera parousia (presencia, visitación), nos dio a conocer El Nombre que ha de invocarse para redención y perdón de pecados, y para toda forma de solicitud humana de favor, misericordia y provisión: YAHOSHU^A. Bajo esta forma original del Nombre en trasliteración y estructura simbólica, y mística contiene el Propósito que vino a traer YAHWEH en dicha parousia. El Nombre de El Mesías de Israel y Redentor de la humanidad, en forma, escritura y significado en todo igual al nombre del sucesor de Moisés, (Josué en castellano) según su transliteración más acertada que en su forma estructural conlleva la verdad más grande que podamos asimilar desde el principio de los días del hombre: YAHWEH SALVA; y en esta forma es la perfecta concatenación con Yeshúa (El Salvará a su pueblo) o Jesús salva. Según su pronunciación correcta: IAHOSHÚA y original.

Que por convención, y tomando en cuenta que posterior al regreso de los judíos deportados a Babilonia y restablecimiento de Jerusalén, la escritura y pronunciación de YAHOSHÚA sufrió un cambio hasta su forma actual Yeshúa, la cual preferiré usar por convención y para no levantar controversias estériles. Y considerando que si YAHWEH permitió dicha transformación Él conoce Sus motivos, y con eso a mí me basta.

Que no es la forma de escritura o pronunciación lo que cuenta para ser guardado por la invocación de EL NOMBRE, del Salvador, y alcanzar la cobertura de su sangre bendita, de forma análoga que un password se utiliza para accesar (vaya: los modismos que hay que utilizar hoy) a un programa cibernético o a una caja de seguridad bancaria. Que el uso de las formas hebreas de los Nombres de YAHWEH, y Yeshúa; es una señal de reverencia que se debe a Ambos Nombres; de guardar la Mitzvah (Mandamiento) de no usar vanamente el Nombre; una forma eficiente de no incurrir en el error de ocultar perversamente EL NOMBRE de D' s. Es mostrar respeto a la lengua hebrea que el D' s de Avraham, de Itzjak y de Ya'akov escogió para comunicarse con el hombre. Y no una forma chocante de aparentar una torpe técnica o necia manía de asimilación de un goyim injertado al mesianismo o al buen olivo. Pues en todo caso, no hay peor lobo rapaz que aquel que finge ser lo que no es, y por lo mismos quien escribe no pretende usurpar un lugar que no le corresponde, ni está entrando al redil como ladrón, sino por La Puerta Yeshúa HaMashiaj.

Finalmente el uso o desuso de las formas hebreas está sujeto de una libre decisión personal, y no debe ser impuesto por institución humana alguna. Igualmente, la observación de las fiestas y días de reposo establecidas por D' s, no salva pero, no son opcionales, ni asunto de folklore, pues Elohim (D' s) las puso por estatuto perpetuo; y aun, pueden ser útiles para una mejor comprensión del significado que D' s les otorga y por las cuales Él las estableció. Y que guardar estos y otros estatutos una vez alcanzado el conocimiento que se requiere , y el discernimiento correspondiente, ya no son más optativos sino obra de fe obediente.

DIOS, D' s, o Elohim

Hay poderosas razones espirituales y suficientemente documentadas en la literatura espiritual, para no referirse al ETERNO con el título de D' s, sino por Elohim, por YAHWEH o Yahvéh en preferencia a Jehová, Yeshúa en preferencia a Jesús o Jesucristo, por Mesías en vez de Cristo. Porque: Dios, Jehová, Jesús, Cristo, han sido tomados en transgresión al Mandamiento, y a su sombra e invocación, grandes males y desgracias se han hecho a lo largo de la historia. Que hay suficiente material documental, analítico, histórico y principalmente Escritural, para fundamentar estos dichos. Y que finalmente su uso y desuso debe llegar a ser aceptado libremente por cada creyente, al tener acceso a la información necesaria para tomar una decisión suficientemente informada al respecto y para tal efecto, en el libre uso del derecho a libre albedrío otorgado por el Mismo Yahweh Elohim. Y a no ser llevado a ello por imposición de institución humana. Siendo Elohim paciente y Justo, por lo cual Él sabrá perdonar los tiempos de nuestra ignorancia. Debiéndose tomar en cuenta que quien trasgrede voluntariamente y con uso de conciencia el Mandamiento, va por su cuenta y riesgo. (ver Hebreos 10:26-27; 2a Pedro 2:20). De manera análoga hay argumentos y razones espirituales poderosas, para evitar en todo lo posible, referirse a D' s solo con el título, o utilizando solo eufemismos o sustitutos como resulta la utilización a ultranza de HaShem, El Nombre, Adonai, por evitar a toda costa llamarle por El Nombre de Yahweh, o por el de El Salvador: Yeshúa.

Obediencia por fe o invalidación de la salvación por gracia

Que en efecto, las obras no salvan, pero la fe sin obras está muerta, Yeshúa dijo claramente "No he venido a abrogar,…", la Torah está vigente, y su observación y cumplimiento, no anula en forma alguna la Jesed (gracia) ni la salvación que es por gracia, pues ningún mortal será capaz de cumplirla toda la Torah, y está escrito que por la transgresión de una sola Mitzvah (mandamiento) se es culpable de las otras seiscientas doce Mitzvot dela Torah, o sea en otras palabras se es culpable de toda la Torah. Por lo cual, la sangre del Pacto Eterno, en Yeshúa se hace absolutamente indispensable para la remisión del pago merecido por el pecado, y salvación de la segunda muerte. Debe hacerse una diferencia entre obedecer las reglas y mandamientos de los hombres lo que constituyen las imposiciones derivadas de la particular interpretación humana, bien a juicio y criterio de rabinos, que por los sacerdotes y pastores de culto. A las cuales Yeshúa HaMashiaj (Nuestro Salvador) hizo referencia (Mt. 23:1-4)
El fiel de la balanza, es decir el Testigo contra quien se va a comparar al pecador, y quien testificará contra el impío en el día del Juicio delante del Tribunal de D' s, ES Yeshúa, el Único hallado Digno.

El pueblo escogido

¿Quién es mi madre y mis hermanos? Los que hacen la voluntad de Mi Padre. Este debe ser el principio ético y moral en base al cual llamarnos hermanos en la fe, herederos de la promesa, pueblo escogido, real sacerdocio, Iglesia del Mesías, congregación santa, Kehilá, Israel, Israel espiritual, hija de Sión, cuerpo de Cristo, santa iglesia. Y todos los nombres tradicionalmente adjudicados a los redimidos de Yahweh, los rescatados por la sangre de Yeshúa.

(Continuará en: "Divide y vencerás". yo, Satanás)